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El árbol de eucalipto pertenece a la familia Myrtaceae, el cual está dentro del género de árboles con flor. Originario de Australia, aunque crece en regiones tropicales y subtropicales. Existen más de 700 especies, siendo muy famoso por el aceite extraído de las hojas y la corteza.
Características del árbol de eucalipto
El eucalipto está considerado como arbusto o como árbol de gran altura. Se divide en 3 categorías: la primera como árbol de los bosques, de un solo tallo hasta la corona, la segunda como árbol de bosque pero que tiene un solo tallo y se ramifican unos pocos metros sobre el nivel del suelo y la tercera Malles especies con menos de 10 metros de altura, de varios tallos desde el nivel del suelo, considerados como arbustos.
El eucalipto es de hoja perenne que varía la altura, de los 10 hasta los 60 metros. La corteza de los eucaliptos se compone de fibras largas que pueden ser extraídas con mucha facilidad. Algunas especies exudan savia medicinal. El follaje es largo, de forma ovalada con colores que va de lo verde brillante al verde oliva. Las hojas son aromáticas y refrescantes al igual que la corteza. El árbol florece a finales de la primavera hasta principios del verano, dichas flores son de tonos crema, blanco, rosa, amarillo y rojo. Las flores tienen estambres mullidos, encerradas en una tapa (opérculo).
Cuidados de los árboles de eucalipto
El cuidado del árbol de eucalipto no es nada complicado, pero deben tener especial atención los primeros años, ya que cuando está bien establecido solo se debe apreciar tan majestuoso árbol.
Es conveniente plantar en un lugar donde este protegido de los vientos fuertes, ya que su sistema de raíces es poco profundas. Para poder plantarlo se debe cavar un agujero dos veces más ancho y profundo. Luego colocar la planta en el centro y llenar el agujero.
Para el riego solo bastará con regarse de forma moderada, incrementado la cantidad en épocas de más calor.
No requiere de mucha materia orgánica y en la mayoría de los casos tan solo basta con un abono sólido granulado de nitrógeno, potasio y fósforo.
La poda es esencial para poder controlar la hojarasca. Lo conveniente es podar en el verano en el mes de mayo. Es fundamental considerar que sangran cuando se cortan, volviéndose susceptibles a las infecciones de hongos, por lo que se debe prestar total atención.
Aunque es muy resistente puede ser atacado por ciertas plagas como la avispa de las agallas de eucalipto (Broca del Longhorn), escabajabos y el Psíllido. Pero la mayoría de ellas pueden ser exterminadas con la aplicación de un insecticida.
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