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Las granadas (Punica granatum) son árboles amantes del calor. Las brillantes joyas de color rubí dentro de las frutas agregan maravillosos toques de sabor a la cocina y a las ensaladas. Por lo que es considerada una de las frutas que está ganando popularidad en todo el mundo. Pero si aún no sabes las características y cuidados del granado, aquí te contamos todo al respecto. ¡Sigue leyendo!
Origen de la granada
La granada silvestre se originó en el Medio Oriente, en Persia, o el actual Irán. Existe evidencia del cultivo de granadas antes de la historia registrada, en excavaciones de la Edad del Bronce de hace 3000 a. C. encontradas en Irán y la región montañosa del Himalaya.
En muchos lugares, como en la India, se consideraba el alimento de la realeza o, al menos, un artículo de lujo. Los faraones de Egipto creían que la granada era tan importante que encargaron ilustraciones de la fruta para que sirvieran como evidencia de su estatus real, como en las pinturas jeroglíficas en el interior de las pirámides y en cerámica fina.
También se acuñaron imágenes de la fruta en monedas, aparecieron en vestimentas religiosas y se exhibieron en pinturas y tallas de templos por artistas de varias culturas, incluido el pueblo judío que vivió en Jerusalén en los tiempos bíblicos.
Los antiguos griegos y romanos también consideraban las hojas como un símbolo de fuerza y vida eterna y, como es común en los frutos que contienen muchas semillas, como símbolo de fertilidad.
En el mito griego, cuando Perséfone es secuestrada por Hades, la fruta aparece como símbolo de vida y regeneración, así como de matrimonio. El mito persa otorga a la granada poderes que son un poco más mágicos por naturaleza, como cuando a Isfandiyar se le concede el don de la invisibilidad después de comer una fruta. Algunos incluso creen que es el fruto del árbol de la vida en el libro del Génesis de la Biblia. Conocida también simbólicamente por su dualidad, es una cualidad destacada por su uso en la medicina tradicional como astringente y laxante, expectorante y antiemético y, reconstituyente y soporífero, por nombrar algunas aplicaciones.
Llevada a Sicilia y al sur de España con los conquistadores musulmanes, su popularidad se extendió. Las granadas fueron introducidas en los Estados Unidos a través de los conquistadores y comerciantes españoles a mediados del siglo XVIII y, con el tiempo, llegaron a cultivarse en regiones con un clima cálido y árido en toda América del Norte, Central y del Sur.
Características de la fruta
Las granadas pueden ser de hoja caduca o de hoja perenne, dependiendo de las temperaturas regionales. Es una especie que tiene un hábito naturalmente parecido a un arbusto.
Las hojas son oblongas y con forma de lanza, lisas y brillantes. Por lo general, miden de 5 a 6 cm de largo. El follaje está intercalado con espinas y, a medida que el árbol madura, algunas de ellas pueden medir casi 5 cm de largo y ser bastante afiladas.
Las plantas pueden ser fructíferas u ornamentales, con atractivos colores rojos, rosados o flores de color naranja que duran todo el verano.
Los frutos, aunque llevan el nombre de “manzana granada”, se clasifican como baya globular y no están relacionados con las pepitas. Cada semilla dentro del exterior duro, o pericarpio, está rodeado de carne firme. Estos se conocen como arilos.
Tipos de granados más comunes en el mercado
Antes de comenzar sobre los cuidados del fruto, es necesario conocer los tipos de granados más comunes para elegir el mejor, según las necesidades.
- Nana. El más pequeño de los granados. Es el más adaptable en una zona de crecimiento más fría. Este árbol se encuentra a menudo en jardinería y se utiliza como planta fronteriza. Si bien, produce frutos pequeños, su calidad comestible no se considera muy buena.
- Wonderful. El granado wonderful es la granada que se encuentra con mayor frecuencia en todo el país y está destinada a la cosecha. El granado wonderful produce muchos frutos, por lo que si se desean granadas como fuente de ingresos o consumo personal, este podría ser el árbol adecuado.
- Sweet Red. El árbol de granada sweet produce frutos temprano en la temporada. Estas granadas suelen ser mucho más dulces que la variedad de árbol Wonderful. Se puede obtener una cosecha exitosa de estos granados, pero es posible que su sabor no sea el esperado si está acostumbrado al sabor de las granadas agrias estándar.
Cómo plantar punica granatum al exterior
El plantar granados resulta fácil si se sigue al pie de la letra. La mayoría de las granadas están disponibles como árboles en macetas, siendo la mejor opción, ya que estarán maduros y comenzarán a fructificar de inmediato.
- Cavar un hoyo cuadrado, no más profundo, pero sí un poco más ancho que la profundidad de la maceta.
- Bifurcar los lados para asegurar que las raíces puedan penetrar en ellos.
- Retirar el árbol de la maceta y sacar las raíces compactadas.
- Verificar que la profundidad sea la correcta. La parte superior del cepellón debe estar al mismo nivel que la parte superior del hoyo.
- Una vez que está a la profundidad correcta, plantar el granado y rellenar alrededor del cepellón con tierra.
- Pisar un poco para reafirmar suavemente la tierra alrededor del cepellón y agregar más tierra si es necesario.
Plantación de granadas en macetas
Otra opción para que prosperen las granadas, es en macetas. Sigue el paso a paso:
- Elegir granadas enanas o injertadas para cultivar en macetas.
- Buscar una maceta o tiesto con buen drenaje que tenga al menos 40-50 cm de ancho y la misma profundidad.
- Llenar la maceta con una mezcla para macetas de primera calidad, antes de plantar el granado con raíces desnudas.
- Reafirmar la tierra y regar un poco para asentar las raíces.
- Cubrir la parte superior de la tierra de la maceta para retener la humedad y garantizar que la maceta se pueda regar fácilmente durante los meses de verano.
Cultivo de granados paso a paso
Aunque pareciera que el cultivo de la granada es complejo, no es así. Lo que si, es que habría que ser paciente para que pueda prosperar y dar frutos.
El lugar para ubicar el árbol debe ofrecer alrededor de 8 horas de pleno sol al día.
El suelo debe ser arcilloso o una mezcla de franco y arena, con un pH de 5,5 a 7,0. Es posible que se realice una prueba del suelo para poder planificar la modificación en función de cualquier deficiencia.
Un buen drenaje también es imprescindible. Las granadas son conocidas por crecer mejor en regiones más áridas. Durante el primer año después del trasplante, regar una o dos veces por semana dependiendo de la cantidad de lluvia que reciba.
Si se encuentra en un área donde las precipitaciones durante todo o la mayor parte del año son escasas, planear ofrecer aproximadamente 1 cm de agua por semana. Se puede utilizar un pluviómetro para medir la lluvia. Las plantas maduras son tolerantes a la sequía.
Si las bajas temperaturas estacionales en el área caen por debajo de aproximadamente -5 °C, se requiere hacer un plan para prepararse para el invierno o plantar una variedad que pueda cultivarse en un recipiente para poder trasladarla a un área más cálida y protegida durante todo el año.
Hay que recordar que estas plantas pueden tener una extensión de más de 5 m, así que es preciso dejar un espacio adecuado entre ellas.
También es útil saber que estas plantas son monoicas, lo que significa que se autopolinizan. Producen flores tanto masculinas como femeninas, llamadas flores “perfectas”. Las flores perfectas son las que finalmente producirán frutos. No es necesario plantar más de un árbol. Sin embargo, puede resultar útil plantar un pequeño grupo de dos o tres para obtener la mejor polinización y rendimiento.
Almacenamiento de la fruta. Una granada que esté completamente intacta y sin daños se mantendrá a temperatura ambiente durante 1 a 3 semanas. Pero cuando se refrigeran, las granadas durarán aún más, al menos unos 2 meses. Si una granada se ha partido, no se conservará y deberá usarse de inmediato. El jugo de granada y los arilos se pueden congelar hasta por un año.
Propagación de la especie. Es posible cultivar el propio granado a partir de una semilla guardada de la fruta, pero el árbol tardará muchos años en alcanzar la madurez y no se garantiza una cosecha de fruta.
Las granadas se pueden cultivar a partir de esquejes, sin embargo, si toma un esqueje de un árbol frutal, habrá más posibilidades de cultivarlo con éxito para que produzca frutos. He aquí cómo propagar con este método:
- Tomar esquejes de granada de un nuevo crecimiento en primavera, de unos 25 cm de largo.
- Colocar en un suelo húmedo, con buen drenaje y cubrir con una bolsa de plástico transparente o una tapa de propagador para mantener la humedad.
- El esqueje debería enraizar en unas pocas semanas para poder colocarlo en una maceta. Mantener en invernadero hasta que se establezca. Hay que tener en cuenta que, incluso si un árbol crece a partir de un esqueje, tardará al menos 5 años en dar frutos.
Manejo de plagas y enfermedades. Las granadas son menos propensas a plagas y enfermedades que muchos tipos de árboles frutales, siempre que se planten en un clima adecuado y se les brinde el cuidado necesario.
Las plagas que pueden visitar a las granadas son: ardillas, pulgones, chinches con patas y orugas enrolladoras de hojas. Las ardillas pueden ser un verdadero desafío, pero la mayoría de las veces, se puede reducir la cantidad de fruta que pierden usando métodos como envolver la fruta en desarrollo con bolsas de barrera e instalar señuelos de animales depredadores para ahuyentarlas.
Las plagas de insectos también pueden ser una molestia en el caso de infestaciones menores, aunque pueden causar pérdidas importantes en las cosechas cuando las infestaciones son graves.
Las enfermedades que afectan a las granadas pueden ser difíciles de controlar, como el hongo cercospora y la pudrición del corazón. Cada vez que las plantas muestren signos de enfermedad o daño por plagas, como caída de hojas y cogollos, decoloración o frutas u hojas masticadas, lo mejor es tomar medidas rápidas para evaluar la situación y desarrollar un plan para evitar daños mayores.
Consejos básicos para el cuidado del árbol
Como repaso a los cuidados de la granada, sigue estos simples consejos:
- Seleccionar un lugar para plantar con plena exposición al sol y suelo arcilloso o franco arenoso.
- Brindar suficiente agua durante el primer año de crecimiento, hasta que la planta se establezca.
- Asegurar de dejar un espacio adecuado entre los árboles, lejos de estructuras y otras plantas, ya que los estándares pueden llegar a ser muy grandes. De lo contrario, seleccionar una variedad enana.
- Poda y mantenimiento. Las granadas crecen naturalmente en forma de arbusto y pueden alcanzar de 5 a 6 m de altura, con casi la misma extensión. Es mejor esperar hasta después del primer año de vida de la planta para podarla y darle tiempo a que se establezca. Si se quiere obtener una planta con la forma de un árbol, se puede elegir de 3 a 5 de las ramas verticales más fuertes en el segundo año. Recortar el resto junto con las ramas más pequeñas que estén por debajo del tamaño.
El granado es un árbol decorativo que precisa ciertos cuidados para que pueda prosperar. Pero que de igual forma, los agradece con un fruto repleto de beneficios para la salud.
El cultivo del granado es toda una ciencia y habría que esperar tranquilamente para verlo prosperar. Así que sé paciente y siente la satisfacción de ver brotar granadas al por mayor. Otra opción para cultivar en el jardín es la piña, sin duda, un gran fruto.