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Florecen durante buena parte del año, pero es en el verano cuando lucen realmente bellas y resplandecientes. Las cannas son plantas que destacan por sus extraordinarios pétalos y colores vibrantes.
Son plantas bulbosas muy fáciles de mantener, mientras tengan todo lo necesario para que puedan desarrollarse de manera eficaz.
Así que es importante saber cómo cuidar de las rizomas de cannas para lograr que este sana por mucho tiempo.
Cuidados básicos de las cannas
Para mantener con salud a una canna es muy fácil. Sin embargo, te recomendamos tener en cuenta los siguientes cuidados para que evitar posibles problemas.
Ubicación ideal para las cannas
Es preciso ubicar a la canna en una zona expuesta directamente al sol. Pero si no hay ningún espacio disponible, puedes colocarla en sombra parcial, siempre y cuando sea luminosa.
Tierra óptima para las cannas
Crece en todo tipo de terrenos, pero se desarrolla mejor en aquellos que tienen un buen drenaje y no tienden a compactarse.
En el jardín no es exigente y puede crecer bien en suelos calizos.
En maceta necesita un buen drenaje, para ello bastará tener agujeros en su base y rellenarse con sustrato universal previamente mezclado con 30% de perlita, arena fina o arlita.
Cómo abonar las cannas
Habría que incorporarle periódicamente un abono de liberación lenta, ya sea alguno que se adquiera en un vivero, o bien, humus de lombriz, desde la primavera hasta finales del verano.
Necesidades de riego de las cannas
Este tendría que ser frecuente, sobre todo en la época de floración, ya que no tolera la sequía. Puedes aprovechar el agua del riego, una vez al mes e incorporar un poco de guano para fertilizar la planta canna. De esta forma, obtendrás una mayor cantidad de flores.
Época de plantación
Esta deberá ser el comienzo de la primavera, siendo un buen momento para plantarla en el jardín o cambiarla de maceta más grande.
Poda
La poda se realizará sobre las partes que se vean afectadas, ya sea flores marchitas u hojas secas.
Multiplicación por semillas o división de rizomas
Se multiplica por medio de semillas o división de rizomas en la primavera.
Semillas. Antes de sembrarlas, habría que tenerlas en remojo con agua durante 24 horas. Después sembrarlas en bandejas de semillero con turba o mantillo que se coloca en el exterior en semisombra. Transcurrido el tiempo, aproximadamente unas 2 semanas empezar a germinar.
División de rizomas. Cuando las plantas cumplen alrededor de 5 años de cultivo, se pueden dividir los rizomas para poder obtener nuevos ejemplares.
Para ello, es necesario desterrarlos y cortar los rizomas con un una navaja previamente desinfectada. Después plantar en macetas individuales o en zonas de jardín y regar.
Plagas más frecuentes en las cannas
Las plantas cannas pueden verse atacadas por varias plagas como las cochinillas, los taladros, las plusias, los gusanos y los pulgones.
Por fortuna no suelen ser graves e incluso se pueden llegar a combatir con productos naturales como el jabón potásico o el aceite de neem.
Enfermedades. Cuando la tierra es muy compacta y se riega en exceso puede quedar encharcada, lo que va a generar hongos. Otro de los más comunes está la Alternaría, el Fusarium y la Rhizoctonia.
Así que ante la presencia de estos hongos, habría que tratarlas con un fungicida y minimizar el riego.
Teniendo en cuenta cómo cuidar de las cannas, ya solo debes considerar entre las diferentes especies de cannas para jardines que hay para poder asegurar el desarrollo.