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Personalizar una casa uno mismo puede ser una tarea fácil, siempre y cuando se tengan los conocimientos adecuados. Los soportes de las macetas recién pintados, un estanque con piedras preciosas, las tejas bien barnizadas puede contribuir enormemente.
Pero si en tus planes está darle un giro a aquellas bases, soportes, adornos y rejas de metal, entonces a continuación te decimos cómo decorar con el efecto óxido, siendo una gran alternativa.
Qué es el efecto óxido
El efecto óxido es de lo más solicitado para dar un toque único a las piezas, estructuras, rejas, etcétera. Es útil en muchos tipos de decoración, aunque clave en la decoración industrial y rústica. Este efecto tiene como fin la creación de relieves cargados de profundidad y sombras para crear ambientes con carácter propio. El efecto óxido se caracterizaba por aportar un tono rojizo, aunque hoy ha evolucionado mucho y podemos ver otros colores capaces de aportar ese efecto, como marrones e incluso grises.
Método para crear el efecto óxido con sulfatos de hierro
Este método consiste en teñir una superficie con sulfatos de hierro para que parezca un efecto natural. Así que sigue estos pasos y luce un jardín fantástico en poco tiempo:
- Mezclar en un recipiente agua y sulfato de hierro hasta que se haya disuelto completamente para obtener una solución salina.
- Aplicar la mezcla sobre la superficie que se quiere dar ese efecto. El color que se obtendrá es naranja. Esto se debe al exceso de sal de la solución, que al secarse y al contacto con el aire toma ese tono. De ahí, comenzará a fijarse el tinte a la superficie.
- Para una correcta aplicación del producto, es necesario hacerlo de forma progresiva. Esto quiere decir que se debe lavar la superficie, volver a lavar y frotar con un cepillo con lo que se podrá conseguir eliminar el exceso de sal. Al eliminar dicha sal, el teñido de óxido se irá agudizando hasta que el exceso de sal pueda desaparecer y la superficie quede completamente teñida.
- Este proceso debe repetirse cada 3 años para poder conservar este terminado impecable. Sin embargo, hay que tener mucho cuidado a la hora de realizar este trabajo, ya que hasta que no se libere el exceso de sal de la superficie, el teñido puede manchar la ropa o aquello que llegue a estar en contacto, lo cual resulta muy difícil de quitar (casi imposible). De ahí que se recomiende ropa de trabajo o aquella que este vieja durante el proceso. Además de guantes para evitar un contacto directo con la piel.
Técnica para hacer el efecto óxido con pintura
Es una pintura que se adhiere a cualquier superficie (incluso puedes conseguir un efecto óxido en madera). Así que vale la pena seguir el paso a paso para lograrlo.
- Preparar una esponja y empaparla en pintura.
- Aplicar con suaves golpecitos. Seca muy rápido y más cuando la temperatura está a tope.
- También puedes aplicar con un rodillo, pero la aplicación es distinta.
- Vierte una pequeña cantidad de pintura en una cubeta y, tras impregnar el rodillo ligeramente, pasar por un cartón para retirar el exceso.
- Pasar el rodillo por algunas partes, haciendo pasadas cruzadas y muy discretas, buscando un “efecto nube”. Así, realizando pasadas aleatorias y superpuestas, iremos logrando el efecto oxidado deseado. Se recomienda dar dos manos.
La combinación del efecto oxido con elementos y materiales de otro tipo, genera un resultado atractivo y elegante.
Así que si lo que se quiere es dar un efecto óxido para adornar alguna zona del jardín o espacio verde, esta puede ser una gran opción que además de ser práctica, podrá enaltecer las plantas y flores. Asimismo, vale la pena considerar el mobiliario de hormigón para decorar exteriores y hacer una fusión de elementos.