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Cómo hacer una fuente de agua para el jardín

Actualmente las fuentes de agua en los jardines ganan más popularidad, sobre todo entre los amantes del estilo zen. Es por ello que en esta ocasión, queremos enseñarte cómo hacer una fuente de agua para el jardín.

Las personas que sufren de ansiedad o depresión, usan las fuentes de agua como terapia. Esto también lo hacen quienes viven bajo constante estrés. El sonido que producen las fuentes de agua tiene efectos calmantes.

Además de estos beneficios terapéuticos, las fuentes de agua son un elemento ornamental, embelleciendo los espacios de nuestra casa. Así que si deseas tener un jardín hermoso, con quietud y en el que puedas relajarte cuando lo desees, entonces no puede faltar una fuente de agua.

Paso a paso para crear una fuente desde cero

El jardín es uno de los lugares de casa que puede destacar de todos los de más. También puede ser un sitio ideal para alejarnos del ruido, descansar mientras contemplamos las flores, o bien, al que podemos llevar a nuestras visitas y deslumbrarlas. En cualquier caso, una fuente de agua quedará estupenda y el aire se respirará con más frescura.

Cuando se habla de construir una fuente de agua tal vez puedas pensar que se trata de algo muy complicado, que va requerir de mucho tiempo o que no será exitoso el resultado. Pero lo cierto es que una fuente de agua se puede realizar con pocos materiales, solo siguiendo unos sencillos pasos, y lo mejor de todo, es que quedará parte de nuestra creatividad y la habilidad para esta tarea. Aquí te explicamos todo.

Materiales:

  • Platos de arcilla
  • Macetas
  • Bomba de agua sumergible
  • Manguera transparente
  • Piedras
  • Plantas artificiales
  • Taladro
  • Pegamento
  • Sellador

Procedimiento:

Antes de comenzar a hacer la fuente de agua, es importante que tengas en consideración los siguientes aspectos respecto a los materiales a usar:

Los platos de arcilla y las macetas pueden ser del tamaño de tu preferencia. Sin embargo, si esta será tu primera fuente, es preferible que todos sean de un solo tamaño, ya que a mayor medida en los materiales, más complejidad será la labor.

La bomba de agua sumergible tendrá que ser de acuerdo a las medidas de las macetas y a la cantidad de agua que queremos que tenga nuestra fuente. Por supuesto, el volumen del agua también dependerá del ancho de las macetas y los platos. Las piedras pueden ser al gusto y las plantas artificiales funcionarán como elementos decorativos.

  • El diseño. Primero debemos escoger un diseño para construir nuestra fuente. El diseño será el que más nos guste y, dependiendo del diseño, podremos hacer la disposición de los materiales.
  • El espacio. En segundo lugar, debemos seleccionar un buen lugar en el jardín para construir nuestra fuente. También debemos comprobar que desde el sitio elegido se pueda enchufar la bomba a una toma de electricidad para que todo pueda funcionar.
  • Preparar la macetas. Debemos aplicar sellador a nuestras macetas. Luego de rociarlas una vez, habría que repetir hasta 3 veces más, dejando pasar un tiempo entre cada aplicación para que vaya secando.
  • Taladro y manguera. Luego, debemos hacer uso del taladro para perforar los platos y las macetas, ya que a través de ellos pasará la manguera. Este paso es necesario para crear el efecto de cascada en la fuente de agua en el jardín. Todos los agujeros deben guardar una alineación, así el resultado será perfecto.
  • Organizar las macetas y colocar la manguera. El plato de arcilla de mayor tamaño será el principal de la fuente. Es decir, este plato enorme será nuestra base. Sobre este plato se ajustara la bomba y a través de las macetas habría que pasar el tubo de goma. Todo debe quedar con precisión para que el agua pueda pasar de manera fluida y armónica. Usar la silicona para ir sellando los bordes por donde pasa la manguera y que esta no se mueva. Con el resto de los platos y las macetas se va a formar una cascada o escalera por medio de la cual irá pasando el agua. La idea es que el agua pase desde el fondo hacia la parte de arriba con ayuda de la bomba.
  • Ornamentarla al gusto. El último paso es el más divertido, ya que se podrá demostrar nuestro talento y buen gusto en la estética de nuestro jardín. En este momento decoraremos la fuente de agua. Para ello usar las piedras, las plantas artificiales, así como también emplear otros materiales como flores. Las fuentes de agua para nuestro jardín las podemos hacer de diferentes tamaños. Esto dependerá de la preferencia, así como del espacio disponible en el jardín. No hay límites en las medidas, estas fuentes pueden ser tan inmensas como pequeñas. Los diseños también son variados. Todo dependerá de la imaginación y creatividad. Alrededor de la fuente se puede colocar rocas, grama artificial, jarrones, u otros objetos a considerar, siempre y cuando sean decorativos y puedan embellecer el entorno.

Beneficios de tener fuentes de agua para jardín

Cuando diseñamos un espacio de exterior, habría que considerar el incluir una fuente de agua para jardín. Un maravilloso accesorio que también se pueden utilizar para terrazas e incluso para balcones anchos. Las fuentes de agua para jardín ponen una nota especial en cualquier espacio, tanto por su presencia como por esa música tan especial que trae consigo el correr del agua.

Objeto imprescindible en aquellas casas que siguen las pautas del feng shui, las fuentes de agua para jardín son capaces de cambiar por completo la atmósfera de un espacio. El agua es un símbolo de vida y en el espacio exterior un pequeño oasis. Sea como sea ese pedazo propio de naturaleza va a permitir dar un toque único al lugar. Un aspecto en el que las plantas de exterior, muebles de jardín y el sonido del agua serán una auténtica invitación a la relajación.

Tanto si tenemos un jardín de inspiración oriental, zen o tradicional, el incluir una fuente de agua para jardín trae consigo grandes ventajas. Unos beneficios que no son únicamente tangibles, sino emocionales. Un plano tan fundamental como puede ser el estético de nuestro espacio Así, si estás pensando en tener una fuente de agua para jardín y no acabas de decidirte, te damos unas buenas razones para que no renuncies a su compañía.

Atraer vida. El principal beneficio de las fuentes de agua para el jardín. Si tenemos un espacio de exterior, no es solo porque necesitamos esa burbuja de calma en la que disfrutar. También habría que vincularnos con la naturaleza, ya que vivir en la ciudad nos aleja de ello. Ese acercamiento a la belleza natural es lo que nos orilla a tener un espacio con flores y plantas. Una manera de permanecer en contacto con la Madre Tierra a la que nos sentimos vinculados todos los amantes de la naturaleza.

Po or esta razón, el tener una fuente de agua para jardín va a permitir disfrutarla más y más. Y es que son un auténtico imán y refugio para los pájaros, una fauna muy apreciada por los amantes de la naturaleza. Las fuentes de agua para jardín nos permitirán observar a esos pequeños animales más de cerca.

Crear un ambiente relajante. El sonido del agua es una de las melodías naturales más armoniosas que existen. Sus incontables propiedades emocionales se utilizan en terapias con música y como herramienta para conciliar el sueño. Una forma de generar un ambiente calmado, en el que reine el equilibrio. La vinculación del agua con esta emoción de paz es un atractivo único de las fuentes de agua para jardín. Una manera de tener un hilo musical único en nuestro espacio de exterior.

Papel clave en el paisajismo. Se habla de la importancia de un buen diseño a la hora de crear un espacio exterior en distintas ocasiones. Los colores y volúmenes son claves para cualquier paisajismo. 

Pero también lo es colocar una fuente de agua para jardín. Tenerla no solo será capaz de articular el espacio. Además, dotará de más naturalidad el conjunto con su simple presencia.

El colocar una fuente o caída de agua en un extremo, mantendrá el agua fluyendo. Una forma de velar por el bienestar de este pequeño ecosistema acuático a la vez que decoramos.

Crear focos de atención en un espacio de exterior. Al igual que lo logra una buena iluminación del jardín, una fuente de agua para jardín puede embellecer todavía más nuestro exterior. Una manera de dar encanto a determinadas zonas o rincones de nuestro espacio. Algo que podemos lograr combinándola con luces, o simplemente, escuchando el agua.

Colocar distintas fuentes de agua para jardín en diferentes lugares nos permite redondear la atmósfera del mismo. Lo ideal es definir los puntos que pueden resultar más interesantes. Cerca de la zona de estar, en las proximidades de una zona de paso, o bien, en un parterre. ¡Está en nuestra imaginación vestir el jardín con susurro de agua!

Proveer un look o estilo decorativo. Dejamos para el final uno de los principales atractivos de las fuentes de agua para jardín, su increíble versatilidad. Una mundo de posibilidades para vestir el exterior de nuestra casa.

Con tintes orientales, en tonos modernos, con aires rústicos o completamente clásicas. De líneas simples, de aspecto sobrio o en diferentes alturas. Sea como sea la decoración del exterior, se puede encontrar una fuente que se adecue a él. Una forma de hacer que nuestro momento de calma sea aun más especial. Uno en el que las horas vuelen y, simplemente, nos entreguemos a disfrutarlas. 

El mejor lugar para colocar la fuente de jardín al exterior, es donde más socializamos. De este modo, se puede aprovechar toda la energía que nos transmite.

Como has podido notar, hacer una fuente de agua en el jardín es una tarea bastante sencilla que todos podemos hacer, de forma personalizada, sin necesidad de relegar esta tarea a terceros o hacer grandes costos por mano de obra. Con un poco de paciencia y un par de elementos podremos darle un toque especial al jardín. Asimismo, convendría saber más sobre las bombas para fuentes y estanques para elegir la correcta.

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