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El género Corylus se encuentra formado por arbustos o árboles pequeños, algunos de los cuales suelen producir un fruto comestible. Sin embargo, hoy no estudiaremos los árboles frutales, sino los de adorno y decoración, y justamente dentro de este grupo existen algunas variedades y especies interesantes en jardinería.
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El Corylus, también conocido como Avellano, puede medir entre 2 y 6 m de altura, de acuerdo a la especie. Sus ramas son erguidas y abundantes, lo que le confiere un aspecto de mata más que de arbusto. Su corteza es lisa y sus hojas son caducas, alternas, dentadas, redondeadas y con una ligera pelusilla.
Las flores masculinas y femeninas se encuentran en el mismo pie, pero separadas. Las masculinas, llamadas amentos, son péndulas y surgen con la primavera de color amarillo y puede medir hasta 10 cm de largo. En cambio, las femeninas, son apétalas y cuentan con un pistilo rojo.
El fruto, recibe el nombre de avellana; es duro y se encuentra rodeado de una bráctea frondosa y puede tener diversas formas y tamaños. El género Corylus perteneciente a la familia de las Coriláceas, comprende aproximadamente 15 especies, todas ellas originarias de América del Norte, Asia y Europa.
Cuidados culturales del Corylus
El Corylus suele adaptarse a cualquier tipo de suelo, aunque lo mejor es que sean permeables y no retengan demasiado la humedad. Incluso, prefiere los calcáreos. En cuanto a la orientación o emplazamiento, adora el pleno sol, no obstante, una sombra ligera no le afectará. Aunque no precisa de una poda específica, esto podría servir para suprimir los numerosos retoños que surgen en la base de la planta, de las ramas muy viejas, o de las innecesarias.
Propagación del avellano
La manera más simple y práctica de propagar el avellano, consiste en arrancar los rebrotes que están en la base de la planta originaria, con un poco de raíces. A través de la siembra de avellanas, se reproducen las especies y las variedades hortícolas. Con el acodo, se logra conservar las características de las variedades, principalmente de la Contorta y de la Atropurpurea.
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Problemas del Corylus
Aunque el Corylus es una planta rústica y resistente, las especies que se usan para la obtención de frutos pueden ser atacadas por dos insectos que generan daños graves. También pueden atacar las especies que se incluyen en jardinería. Al no ser fundamental la salud de las avellanas, estas plagas pasan desapercibidas. Se trata del balaninus nucun y de la carpocapsa, que atacan al fruto o avellanas. Combátelos con insecticidas sistémicos.