Contenido del artículo
Muchos tipos de Cytisus son conocidos como plantas de jardín, pero existen otras variedades también apropiadas para el interior. La Retama o Genista, como también se los suele llamar al Cytisus, es un arbusto resistente que despliega una gran cantidad de flores blancas o amarillas sobre sus ramas. Una las especies más fáciles de cultivar en el interior es el Cytisus recemosus.
Sus hojas son de color verde oscuro, tienen una textura sedosa y se dividen para formar tres lóbulos. Las flores al igual que muchos Cytisus de jardín, son pequeñas, numerosas y coloridas. Para que la planta se mantenga compacta en el interior de tu casa, lo mejor será cortar cualquier rama desordenada apenas crezca. Con unos pocos cuidados y aire fresco, podrás conseguir un ejemplar hermoso y llamativo.
Cuidados de Cytisus en primavera y verano
Trasplanta al Cytisus inmediatamente después de finalizada la floración primavera y en verano, haciendo uso de un buen compost. En verano, las temperaturas que oscilen entre los 15 y 18 °C ayudarán a que tu Retama crezca saludable. Proporciónale aire fresco y una ubicación soleada; si la expones al sol, pero no al aire fresco, se secará en poco tiempo.
Entre primavera e inicios de otoño riega tu planta abundantemente y añade un fertilizante líquido al agua, cada dos semanas, mientras estén floridas. Si hace mucho calor, lleva tu planta al exterior para que disfrute del sol y del aire. Remueve todas las flores que se vayan marchitando.
Cuidados de Cytisus en otoño e invierno
Durante el otoño y el invierno mantén el Cytisus a una temperatura de entre 7 y 10 °C, incrementándola después a 13 °C hasta mediados de primavera. A lo largo de este período, riega tu Retama moderadamente, asegurándote de que sus raíces no se sequen. Proporciónale aire fresco, pero no la expongas a las corrientes de aire frío. Procúrale un sitio soleado.
Problemas del Cytisus
Si tu planta no forma flores, es que precisa abono; agrégale fertilizante líquido al agua cada dos semanas, durante la temporada de crecimiento. Por otro lado, el pulgón verde puede atacar las flores y las hojas, y la decoloración de estas últimas se debe a la araña roja que deposita huevos pequeños en la cara posterior de las hojas; rocía la planta con un insecticida con base de malathion o, para prevenir, usa un insecticida sistémico.