El pensador que medita
Pequeña figura que nos invita a reflexionar.
Estas siete figuras que miden 20x20x60 centímetros, con peso, textura y color variado según la pieza (aproximadamente 40 kg) están realizadas por nosotros artesanalmente a partir de una talla insólita traída desde Bali; cada imagen es única pues las hemos hecho diferentes en cuanto al peso, color y textura.
Representa en el lenguaje universal de signos a un hombre primitivo inmerso en sus pensamientos.
El sabio no dice todo lo que piensa, pero siempre piensa todo lo que dice.
Aprender es todo un proceso interior y un permanente batallar con el intelecto, la emoción, las dudas y la conducta.
El pensamiento es una fuerza vibratoria vital; es la fuerza más viva, sutil e irresistible que existe en el universo.
Quien tiene pensamientos puros habla poderosamente y produce una impresión profunda en las mentes de quienes le escuchan. Influye en millares de personas por medio de sus buenos pensamientos.
Un buen pensamiento primero beneficia a quien lo piensa, mejorando su cuerpo mental. En segundo lugar, beneficia a la persona en la cual se piensa. Y, finalmente, beneficia a toda la humanidad, mejorando la atmósfera mental general.
Oda al bambú
Oda al bambú Un hombre puede sentarse en un casa de bambú, bajo un tejado de bambú en…