El nitrógeno es un componente esencial para el desarrollo de las especies. A pesar de que este elemento se puede encontrar fácilmente en las tiendas especializadas, existe la posibilidad de crear los propios y mejor aún con elementos orgánicos para que las plantas puedan crecer de forma sana.
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Ejemplos de fertilizantes orgánicos ricos en nitrógeno
Harina de cangrejo. Es un producto que es a base de cangrejos de tierra y cuenta con nitrógeno. Sin embargo, este material se descompone lentamente y solo provee un poco del mismo. Así que se usa para hacer un abono o se mezcla con fertilizantes para mantener un porcentaje nivelado de nitrógeno en la temporada de crecimiento.
Compost. El compost es material orgánico descompuesto que suele proveer un porcentaje considerable de nitrógeno a la tierra. Una pila de compost cuenta con nutrientes benéficos, el cual incluye fósforo, nitrógeno y potasio. En lo que respecta al nitrógeno, las bacterias rompen con el amoníaco y después se convierte en nitratos que las plantas absorben a través de las raíces.
Granos de café. Los granos de café molidos en la tierra, o bien, al incorporarse a una pila de fertilizantes ya establecida puede ser una gran opción. Los granos de café cuentan con un 2 % de nitrógeno por volumen, siendo relativamente alto. Por tanto, se puede incorporar el café molido directamente esparcido sobre la superficie y luego cubrir con mantillo orgánico.
Ciertas legumbres. Algunas plantas como las legumbres almacenan nitrógeno en los nodos de sus raíces. Estos nodos sueltan dicho elemento gradualmente en la tierra mientras que la planta vive y al morir la especie, mejora la calidad de la tierra. Por lo que el lanzar algunas legumbres en la tierra (de preferencia aquellas de crecimiento lento) o usar el método de barbecho para reponer la cantidad de nitrógeno en la tierra podría resultar ideal.
Estiércol. El estiércol del ternero, oveja y cerdo cuentan con mayor concentración de nitrógeno. Así que el estiércol descompuesto es una opción excelente, ya que las bacterias empiezan a descomponer el elemento de modo que la planta podrá absorberlo mejor. Lo único es que habría que considerar que el estiércol tiende a incrementar sal en la tierra y puede fomentar el desarrollo de hierbas.
Además, habría que estar al pendiente de la cantidad que se suministra de este elemento, ya que el nitrógeno se rompe en amoníaco y nitratos, ambos no son retenidos y podrá reducir la calidad del agua.