Guía básica del cultivo de la chalota

Chalota (Allium ascalonium) es un bulbo también conocido como escaloña, shallot, chalote, echalote o carlota. Pertenece a la familia (Aliáceas) así como la cebolla, el poro y el ajo.

Es originaria de Asia y gracias a su sabor suave combina perfecto con distintos platos. Así que por todo ello y mucho más, vale la pena conocer la guía básica del cultivo de la chalota para considerar esta gran hortaliza.

El término “chalote” se refiere a un grupo en particular de plantas en un subgrupo de cebollas, llamado “cebollas multiplicadoras“, que produce dos o más bulbos por especie. Aunque las chalotas fueron consideradas una especie separada (Allium ascalonicum), ahora se clasifican botánicamente como una variedad de cebolla (Allium cepa var. aggregatum – chalotes holandeses, o A.oschaninii – chalotes franceses).

Características y variedades de la especie chalote

La morfología externa de la planta chalota es muy parecida a la de la cebolla. Es una planta bulbosa, perenne, que suele cultivarse como especie anual, las raíces adventicias, de 1 a 2 cm de diámetro y de 10 a 25 cm de largo, que surgen del tallo verdadero. Las hojas están en disposición alterna, dísticas, glaucas, producidas en sucesión desde el ápice del tallo ensanchado, de color verde claro a oscuro, hueca, erecta o inclinada. Los bulbos están formados por el engrosamiento de las bases de las hojas por encima del tallo verdadero.

Variedades de chalotes

Los chalotes por lo regular se dividen en variedades tradicionales e híbridos para tener un tamaño ideal o una mejor longevidad de almacenamiento. Los tipos de chalotes más sobresalientes son:

• French Grey. Considerada como una reliquia y la única chalota verdadera para la cocina gourmet
• Rojo francés. De sabor picante y fácil de pelar
• Pierna de rana. Una especie muy suave. Los bulbos son alargados como el anca de una rana
• Ambition. Chalota francesa híbrida de gran tamaño se conserva muy bien
• Conservor. Un híbrido parecido a ‘Ambition’ pero más grande y menos redondo.

Plantar Allium ascalonium en primavera y otoño

La chalota es una especie que cuidados simples y nada demandantes. He aquí cómo plantarla:

Los chalotes plantados en otoño necesitan una capa de mantillo para protección (de 10 a 15 cm), ya que los chalotes crecen cerca de la superficie del suelo y tienen sistemas de raíces poco profundos. Retirar con cuidado el exceso de mantillo a medida que el suelo se calienta en primavera.

Los chalotes plantados en la primavera también se benefician con un mantillo de 1 a 2 cm, porque los protege de las olas de frío y ayuda a evitar que los nuevos bulbos se sequen.

• Separar cada hoyo de plantación al menos a una distancia de 10 a 15 cm en filas separadas por 30 cm.
• Asegurarse de que los bulbos de chalota estén plantados con la raíz hacia abajo y la punta hacia arriba.
• Plantar los bulbos lo suficientemente profundos para que la parte superior aún sea visible.
• Regar con abundantemente agua después de plantar. Evitar que las chalotas se sequen, pero no regar en exceso.
• Eliminar todas las malas hierbas a medida que aparezcan para mantener baja la competencia por nutrientes.

Cuidados de la planta echalote

Para que las chalotas puedan prosperar de la mejor forma, a continuación te decimos cuáles son los cuidados necesarios. ¡Toma nota!

Luz. Para mejores resultados, el cultivar los chalotes a pleno sol es lo ideal. Esto significa, al menos 6 horas de luz solar directa la mayoría de los días. Los chalotes también pueden tolerar un poco de sombra, pero es posible que no sean muy robustos.

Suelo. Plantar chalotes en el suelo con un buen drenaje y enriquecerlo con materia orgánica es primordial. Les gusta un pH del suelo de ácido a neutro de aproximadamente 5,5 a 7,0.

Agua. Los chalotes precisan de agua continua durante toda la temporada de crecimiento, sobre todo en los períodos secos. Por lo que habría que asegurarse de que la tierra permanezca ligeramente húmeda pero no muy empapada, ya que puede pudrir los bulbos.

Temperatura y humedad. Los chalotes requieren un período de inactividad de al menos un mes con una temperatura de 10 ˚C antes de comenzar a crecer. Las plantas de chalote prefieren temperaturas del suelo de 30˚C. Además, siempre hay que regar regularmente y mantener el suelo con buen drenaje.

Fertilizante. Los chalotes generalmente no requieren fertilizante. Sin embargo, modificar el suelo con abono en la primavera ayuda a incorporar nutrientes y mejorar el drenaje.

Poda. Cortar los tallos de las flores para que la energía creciente llegue a los bulbos pero no cortar las hojas, ya que aporta energía al bulbo.

Propagar chalotes. La mayoría de los chalotes se cosechan en su primera temporada de crecimiento antes de que florezcan y produzcan semillas, por lo que la única forma de propagarlos es a partir de los bulbos. He aquí cómo se propagan los bulbos:

• Al cosechar las chalotas, guardar algunos de los bulbos de aspecto más saludable para replantarlos el próximo otoño o primavera.
• Dividir los bulbos de chalota, asegurándose de que quede una capa parecida al papel en cada sección.
• Almacenar en un área fresca y seca.
• Cuando llegue el momento de plantar, elegir un lugar soleado y cavar un hoyo de aproximadamente el tamaño de un bulbo individual.
• Mezclar un poco de abono con la tierra.
• Plantar el bulbo con el extremo puntiagudo justo por encima de la línea del suelo.
• Regar para mantener la tierra ligeramente húmeda. Los brotes verdes deben aparecer en una semana aproximadamente.

Cosecha de chalotes. Los chalotes suelen estar listos para cosechar aproximadamente entre 100 y 120 días después de la siembra. Los chalotes indican que están listos para ser desenterrados una vez que sus hojas se vuelven marrones y se marchitan. Desenterrar toda la planta y sacudir el exceso de tierra. Luego, colocar en un lugar seco y con sombra durante un par de semanas para que se cure. Después, retirar las raíces y las puntas. Se pueden guardar las chalotas en un lugar fresco. Colocar en una bolsa de malla y asegurarse de que tengan buena circulación de aire.

Plagas y enfermedades comunes de las plantas. Los chalotes están sujetos a muchos de los problemas como las cebollas. Las plagas que atacan a los chalotes incluyen larvas de mosca de la cebolla y roedores. En cuanto a las enfermedades está, la pudrición blanca y la pudrición del cuello.

• Pudrición blanca es una enfermedad fúngica que ataca raíces y base del bulbo. Esta puede persistir en el suelo hasta 15 años, por lo que no habría que volver a cultivar chalotes en el mismo lugar durante mucho tiempo. Desechar las plantas afectadas.
• Pudrición del cuello, es una enfermedad fúngica transmitida por el suelo que ataca el cuello y las hojas de la planta. Desechar las plantas y no volver a plantar en la misma zona durante al menos 3 años. Tener cuidado con la mancha morada y la raíz rosada.

Cultivo de la escaloña a partir de semillas

Para cultivar chalotes a partir de semillas sigue el paso a paso:

Plantar las semillas aproximadamente de 8 a 10 semanas antes de la última fecha de helada proyectada en el área.

Usar una bandeja poco profunda con una mezcla para semillas y sembrar las semillas a 1 cm de profundidad. Colocar la bandeja en un lugar luminoso y no dejar que la tierra se seque.

Endurecer las plántulas antes de plantarlas. Una vez que haya pasado el peligro de las heladas, las plántulas se pueden plantar a una distancia de 10 a 15 cm.

Los bulbos de la chalota pueden pasar el invierno en el suelo, ya que permanecen inactivos durante la temporada de invierno. No es necesario ningún mantenimiento especial para que pasen el invierno, siempre que el lugar de plantación tenga un buen drenaje. Una vez que las temperaturas comienzan a subir, la planta se despierta, estimulando el proceso de crecimiento.

Cultivo del chalote en macetas

Cultivar chalotes en un recipiente es útil, ya que puede moverse el tiesto para que la planta reciba la luz solar adecuada. También se puede controlar cuidadosamente el consumo de agua de la planta.

Regar la planta cuando la tierra esté seca (alrededor de 2,5 cm hacia abajo), verter agua lentamente hasta que salga por los orificios del tiesto. Los chalotes generalmente necesitan alrededor de 2 cm de agua cada semana, tal vez más en condiciones extremas de calor.

Agregar un fertilizante a los chalotes en contenedores a principios de la primavera. Aplicar un producto fertilizante equilibrado para obtener mejores resultados.

Una maceta de 20 cm de diámetro es ideal para un diente. Asegurarse de espaciar varios dientes a unos 15 cm de distancia, como se haría al plantar en el suelo.

El contenedor debe tener un buen drenaje. Lo mejor es un recipiente de arcilla sin esmaltar para permitir que el exceso de humedad del suelo se evapore a través de sus paredes.

La chalota es una planta interesante que puede cultivarse fácilmente, además de su de gran valor culinario. Incluso puede considerarse una adición al huerto o jardín por sus innumerables propiedades y beneficios para la salud.

Sin duda, el cultivo de la chalota no es muy demandante, por lo que sería ideal tener esta gran especie el jardín. Además, podrás crear infinidad de guisos con un sabor inigualable. Otra excelente opción es el cultivo de la cebolla, así que considéralo.