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Para que una planta pueda crecer y desarrollarse correctamente, es necesario que se le añada un abono de calidad durante la temporada de crecimiento.
Es por ello que se aconseja nutrir a las plantas, así que habría que saber cómo realizar un abono foliar para que puedan lucir resplandecientes y se desarrollen de manera óptima.
La importancia del abono foliar
La importancia del abono foliar se ha convertido en una práctica común e importante para los productores, porque corrige las deficiencias nutrimentales de las plantas, favorece el buen desarrollo de los cultivos y mejora el rendimiento y la calidad del producto.
Las primeras plantas que aparecieron son las algas y al no contar con un sistema radicular, debían absorber los nutrientes por medio de las hojas. Esta característica no la han perdido.
Incluso absorben más rápido el abono a través de sus partes foliares que de sus raíces. Esto es porque entran más rápidamente en el cuerpo de las plantas al ser muy soluble.
Por este motivo, los abonos foliares son un tratamiento excelente para corregir deficiencias de micronutrientes como calcio, zinc, cobre, hierro y manganeso.
Cómo realizar un abono foliar
Este abono foliar no solo aporta al suelo los materiales nutritivos, sino que influyen de manera positiva en la estructura del suelo. A continuación encontrarás los materiales necesarios y los procedimientos:
Abono foliar para estimular el crecimiento
Materiales para estimular el crecimiento:
- 1 l de agua
- 20 g de ortiga seca (100 g fresca)
Procedimiento para estimular el crecimiento:
- Vierte el agua y las hojas de ortiga en un recipiente.
- Remueve una vez al día durante 15 días.
- Finalmente, cuando está listo y se aplica por la mañana.
Abono foliar para estimular la floración
Materiales para estimular la floración:
- 1 l de agua
- 4 cáscaras de plátano
- 2 cucharadas de azúcar
Procedimiento para estimular la floración:
- En un recipiente vierte el agua, las cáscaras de plátano y el azúcar.
- Lleva al fuego y deja hervir durante 5 minutos.
- Finalmente, diluye una parte del abono en dos partes de agua de riego y aplica.
Cuándo aplicar el abono foliar
El abono foliar se puede aplicar cuando las plantas muestran síntomas de carencias nutricionales. Es decir cuando se ven estos síntomas:
- Hojas viejas que empiezan a amarillear desde la punta hacia dentro. En este caso no habría que confundir con la vejez de la planta ni con el exceso de riego.
- Hojas amarillas con los nervios verdes. Esto ocurre mucho en plantas acidófilas que se cultivan en sustratos con un pH de 7 o superior y se riegan con aguas calcáreas. Esto se debe a la falta de hierro.
- Hojas pequeñas y de formadas. Por lo regular en plantas cultivadas en suelos ácidos que precisan crecer en terrenos cálidos. Esto se debe a la falta de calcio.
- Hojas jóvenes que empiezan a amarillear. Es común en palmeras. Esto se debe a la falta de manganeso.
- Hojas con puntas acorchadas. Además de ello, notas que produce menos flores y frutos. Esto es porque les falta potasio y otros nutrientes esenciales.
- Hojas viejas se vuelven rojizas o amarillentas o pierden color. Se debe a la falta de nitrógeno, uno de los nutrientes más importantes para las plantas.
- Pobre producción de nuevas hojas. Estos síntomas se deben a la falta de fósforo y otros nutrientes importantes de las plantas.
Cómo se aplica el abono foliar
El abono foliar es un líquido que se aplica sobre las hojas aunque también sobre los tallos verdes.
- La manera de hacerlo es, removiendo el pulverizador y rociar sobre la planta.
- Es importante que no se haga en el momento en que el sol está de manera directa ni tampoco en días ventosos, ya que el propio viento hace que caiga de las hojas y reduce su eficacia.
Ahora que ya conoces cómo realizar un abono foliar y cuándo colocarlo, no esperes más y haz el tuyo para que veas prosperar tus plantas de la mejor forma. Además, no está de más saber las ventajas de tener un abono orgánico a base de frutas.