La jardinería puede llegar a ser un hobbie apasionante y enriquecedor, sobre todo porque eres el principal testigo de transformar un simple espacio en un verdadero edén. Pero al tratarse de seres vivos, cada especie necesita de cuidados diferentes, mucha dedicación y sobre todo, de mucho amor.
Así que si estás comenzando en este universo o si ya llevas un tiempo en él, hay errores comunes de jardinería que probablemente estés cometiendo, pero que tienen fácil solución, ¡Presta atención para evitarlos desde ya!
Problemas frecuentes de jardinería
La creación de un jardín puede parecer algo muy sencillo. Sin embargo, este proyecto requiere ciertos cuidados para que pueda prosperar. Así que ya seas principiante o un conocedor, puede que estes cometiendo ciertos errores que a corto o largo plazo podrían resultar un grave problema. He aquí los más frecuentes:
No estudiar la ubicación. Antes de empezar con el diseño de un jardín, es preciso conocer las plantas que van a habitar en él. Aunque pienses que van a lucir radiantes en la entrada de tu casa, lo más probable es que no sea una buena idea y duren muy poco. Al visitar un vivero, no te dejes llevar por la belleza y considera las condiciones climáticas, el espacio disponible y, por sobre todo, los cuidados que requieren cada una de ellas. Un consejo básico es, aclimatar las plantas poco a poco para que no se quemen en los primeros meses de su nueva ubicación.
No controlar el riego. ¡Si las riegas poco, se pueden secar, pero si la riegas de más, pueden terminar totalmente ahogadas! Pasarse o quedarse corto, son uno de los errores más comunes de jardinería.
Regar sin revisar la humedad de la tierra. Para ello, es primordial hacer un breve chequeo de la tierra. Así que insertar un palo de madera en la tierra y revísalo para ver si sale limpio. Si sale sin tierra, entonces es momento de regar de nuevo.
No mojes las plantas ni las flores, solamente la tierra, ya que si se mojan, es más fácil que se pudran. Riega siempre por la tarde y, con ello vas a evitar que el agua se evapore rápidamente.
Olvidar el abono. Sin importar si están en el suelo o la maceta, todas las plantas deben alimentarse, sobre todo en la época de crecimiento. Los abonos aportan los nutrientes necesarios a las plantas para que puedan desarrollarse perfectamente. Por eso, busca aquellos con fósforo para potenciar el desarrollo de las raíces y con potasio para que transporte nutrientes a la vez que contribuye al desarrollo de tejidos más resistentes.
Cultivar un solo tipo de planta. Una hilera de árboles de la misma especie puede ayudar a crear un orden y además resultan útiles para marcar terrenos, tener una mejor vista o brindar privacidad. Sin embargo, esta labor puede llegar a ser una mala idea en caso de plaga o enfermedad. Así que intenta diversificar la elección con árboles, arbustos y flores de distintas clases. De este forma, no solo evitarás contagios, sino que le darás un toque único al paisaje y ofrecerás un gran hábitat para aves y otros animales.
Cavar muy hondo. Este es uno de los errores más comunes de jardinería, por lo que las plantas mueren fácilmente y además es uno de los más difíciles de identificar. Para no caer en este fallo, cava un hoyo dos o tres veces más ancho que el contenedor y coloca la planta al mismo nivel que en la maceta.
Utilizar herramientas de jardinería inapropiada. Cuando se usan las herramientas de jardinería, estas deben ser de buena calidad para evitar maltratar las plantas al manipularlas. Además, no hay que olvidar limpiarlas bien después de usarlas para alargar su ciclo de vida.
Asimismo, existen distintos tipos de herramientas para cada tarea de jardinería. Ahora que si no sabes por cuál empezar, una buena opción es acudir a un centro especializado para sacar cualquier duda.
Combinar cualquier planta en un mismo contenedor. No todas las plantas pueden plantarse juntas en un mismo tiesto. Los riegos pueden ser diferentes y el ritmo de crecimiento también lo es.
No analizar las plantas que compras. Unos de los errores más frecuentes de jardinería es no tener en cuenta los siguientes factores al ir a comprar una planta al vivero:
- Observar el estado de sus hojas. Estas pueden contener alguna plagas o enfermedades que contagie a las de más plantas que alberga el espacio verde.
- Prestar atención a su cepellón. Si las raíces sobresalen de la maceta, esto puede indicar que la variedad lleva mucho tiempo en el vivero. Es mejor elegir aquellas que se esconden en su interior.
- Escoger las variedades con las flores ya abiertas. Sabemos que son plantas mucho más llamativas, pero si eliges aquellas que aún no han abierto sus capullos, estarás alargando su floración.
No cuidar el césped a lo largo del año. Para conseguir un césped reluciente, es necesario cuidarlo a lo largo de todo el año. Los cuidados pueden variar en función de la estación. Pero los básicos son: segarlo, abonarlo, airearlo y escarificarlo. Aunque gracias a todas las innovaciones que están surgiendo en el mercado, cada vez más es sencillo mantenerlo.
Si estás iniciando en el mundo de la jardinería, lo mejor es empezar con plantas que podrás cuidar y que su mantenimiento sea fácil para que el resultado sea el adecuado.
Así que es momento de reconocer y evitar estos errores de jardinería para asegurar un buen desarrollo de las plantas y otras especies. Y ¡no tengas miedo a equivocarte! Todos hemos sido jardineros principiantes en algún momento. Quizás, también convendría seguir ciertos consejos básicos de jardinería para principiantes para ir a la segura.