En uno de esos viajes en los que nos hemos prodigado en verano recaimos en el Parador Nacional de Siguenza, es un castillo medieval del Siglo Xll. Antes de parador fué casa y cuna de obispos, cardenales y reyes, así que como resistirse a pasar unos días sintiendo ese peso, fantasmas incluidos. No era la primera vez que estaba, ya estuve hace casi 20 años y lo recordaba bien, con gusto, por eso queria volver.
Alli estaba el patio, el impresionante comedor, la capilla, etc, todo exactamente igual, y es que lo que realmente vale la pena no es necesario cambiarlo, siempre está bien, es intemporaneo.
De entrada sobria pero aplastante
Mobiliario de época, mucha piedra
Recuerdos de tiempos mejores, o peores
Jardines dignos pero no excesivamente. Mi visión siempre parcial no me deja ni un minuto de mi vida.
Fuente en el patio empedrado
Pozo de piedra de época
Arquitectura típica de los castillos castellanos.
Piedra arenisca rojiza, como el color de los campos que lo rodean.
Fantastico sitio para descansar.
Carlos Morales Sebastián
Técnico de Garden Center Ejea