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Aunque estamos en otoño, seguramente ya estés pensando en cómo tener un jardín repleto de flores en la siguiente primavera. De ser así estás en el post indicado porque en esta ocasión te diré como plantar bulbos en otoño para llenar tu jardín de color en los próximos meses.
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Afortunadamente existen muchos bulbos de otoño entre los que elegir, de acuerdo al tipo de floración o colorido que estés buscando para tu jardín. Lo bueno de plantar bulbos es que no requieren muchos cuidados y son ideales para quienes no tienen mucha mano con la jardinería, pues no tendrán problemas con ellos, siempre florecen.
Elige los bulbos de otoño
Existe una enorme variedad de bulbos de otoño entre los que puedes elegir como, por ejemplo, jacintos, azafrán, anémonas, narcisos, amarilis, crocus, fresias, ranúnculos, calas, tulipanes, iris, fritillaria, muscaris, azucena, ixia, allium, etcétera.
Prepara el terreno para plantar bulbos en otoño
Para cumplir con las necesidades de los bulbos de otoño deberás proveerles un sitio soleado y protegido del viento, como así también un sustrato ligeramente húmedo y con buen drenaje, dado que no toleran el encharcamiento.
Si la tierra es arcillosa, agrega abono orgánico para aligerar el terreno y evitar la acumulación de agua.
Planifica la siembra
Si deseas que florezcan de forma escalonada, puedes plantar bulbos en otoño mes a mes desde septiembre hasta diciembre, jugando con diferentes tonalidades y ubicándolos tanto en terrenos como en macetas, de tal manera que puedas crear un jardín vistoso y colorido.
Si quieres crear un macizo de flores de distintas alturas y colores, puedes colocar bulbos de tulipanes en la capa inferior de la maceta, narcisos en la siguiente, jacintos en la próxima y crocus en la parte más superficial.
Distancia y profundidad
Cada bulbo se planta con las raíces para abajo a diferente distancia y profundidad.
Aunque en cada paquete encontrarás las especificaciones, puedes seguir este truco: mide el diámetro de los bulbos y siémbralos al triple de centímetros de la superficie. Esto quiere decir que si un bulbo mide 5 cm, tendrás que sembrarlo a una profundidad de 15 cm.
Por otra parte, ten en cuenta que cada cepa deberá estar ubicada al doble del diámetro del bulbo.
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