El peral (Pyrus communis) es un árbol que está dotado de una gran belleza, por lo atractivo de sus frutos y profusas floraciones. Proviene del sureste de Europa y Asia menor. Los perales son indicados para conducir cordones y formas planas. Además de ser injertados sobre patrones de poco vigor.
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El peral y su cultivo
Requerimientos climáticos: Los perales se desarrollan en climas áridos, moderados a cálidos. Los veranos secos son esenciales para controlar la enfermedad bacteriana. Las noches frías (10˚C) durante el mes anterior a la recolecta pueden ocasionar maduración prematura, afectando el tamaño y la calidad.
Los perales son menos resistentes al frío que los manzanos. Por tal motivo es más restringido a climas sin invierno frío. Aunque existen ciertas variedades que resisten temperaturas bajas.
Requerimientos de suelo: Los arbustos crecen mejor en suelos profundos, aireados, arenosos, bien drenados o francos de aluvión. Los árboles precisan suelos profundos (profundidad entre 1 a 2 m) y suelen crecer en suelos con capas freáticas altas.
Cultivo: los factores que suelen afectar el KC se debe al tipo de cultivo cuando hay evaporación de suelo.
Etapas de crecimiento: etapa inicial, etapa de desarrollo del cultivo, etapa de mediados de temporada y etapa final de temporada. La duración para cada etapa es un factor importante para la cantidad de riego a aplicar. Incluso para calcular el tiempo de aplicación del riego.
Patrones de peras: se cultivan los perales sobre patrones de membrillero, ya que los membrilleros producen árboles más pequeños, facilitando la recolección y se induce una floración más pronta.
Plantación: se planta a finales del otoño o el invierno si tiene la raíz desnuda. La preparación del terreno y la plantación es igual que el manzano.
Abonos: De fondo: estiércol 50 toneladas por hectárea, fósforo 400kg/ha, potasio kg/ha. De mantenimiento: 30 toneladas por hectárea cada 3 años, nitrógeno 100 kg/ha, fósforo 100Kg/ha, potasio 150Kg/ha.
Cosecha: la pera no tiene que madurar como las manzanas. Así que por ello apenas tome un cambio de color la piel del fruto (de verde oscuro a verde más claro) se puede cosechar. Si al tomar el fruto, se tuerce fácilmente y se desprende con facilidad es que está casi maduro y el sabor será fantástico. Ahora que se si rompe el tallo habría que esperar un poco más.
Almacenamiento: para almacenar las peras en condiciones frescas se deben colocar en cajas de madera, sin envolver para que no se decolore la pulpa.
COMO ABONAR LOS PERALES Y CON QUE.