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Los sustratos son la materia prima que se usa para el suelo del terrario. Siendo un elemento vital, ya que los reptiles van a estar en contacto con la superficie. Así que por ello existen muchas alternativas para poder recrear un hábitat natural.
Tipos de sustratos para el terrario
Fibra de coco
La fibra de coco es un clásico para los terrarios, ya que una gran variedad de especies admiten este tipo de sustrato, sin dejar de mencionar su coste bajo.
Hojarasca
Se usan hojas de árboles que resultan excelentes para retener la humedad e incluso sirven de escondite para los anfibios o reptiles.
Las hojas que no se recomiendan son las de coníferas y eucalipto. Ahora que si se consiguen al recolectarlas, es importante tomar las debidas precauciones para evitar aquellas que están contaminadas.
Arena cálcica
La arena cálcica es un lecho sumamente decorativo por la variedad de colores. Además, viene enriquecida con calcio, por lo que al ingerirla no es peligrosa, más bien sería benéfica para el desarrollo óseo.
Habría que considerar si es lo mejor y más apto para la especie que vivirá con ella.
Papel periódico
El papel periódico es el sustrato más económico. No es un elemento que se encuentre en su hábitat natural.
No obstante es ideal para estancias temporales, cuarentenas, animales decaídos o que esperan por la renovación de su lecho.
Es indicada en especies de serpientes, sobre todo de un tamaño considerable que requieren un cambio regular de suelo en el terrario.
Cortezas
El sustrato de cortezas se elabora mediante la selección de trozos de corteza de árboles que han sido tratados con fungicidas y antibacterias y, que por ende, han pasado por un minucioso proceso de limpieza para evitar ensuciar o contaminar.
Musgo
El musgo es otro sustrato común, sobre todo en terrarios de bosque o tropical. Se puede conseguir un efecto ornamental único, ya que aporta un ambiente natural.
Arena del desierto
La arena del desierto son para terrarios desérticos con arenas naturales en las que han pasado un arduo proceso de selección para obtener un grano adecuado.
Sin dejar de mencionar una limpieza libre de impurezas, favoreciendo el microclima que requiere el terrario.
