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Tener un huerto es una forma excelente de producir nuestros propios alimentos de manera natural y orgánica, libre de cualquier impureza. Pero al iniciar esta labor, quizás de los primeros cuestionamientos que te haces es cómo preparar la tierra para huertos. Así que al ser clave para tener plantas sanas y fuertes, es preciso conocer el proceso.
No dejes de leer: ¿Qué es la labranza de los suelos?
El suelo
Al iniciar el huerto, es preciso saber las propiedades de suelo y los distintos tipos. Estas características ayudarán a saber si se trata de un suelo en óptimas condiciones para poder iniciar con las labores de siembra. De las condiciones más importantes es que el suelo debe ser de color oscuro. Entre mayor sea la tonalidad, será mucho mejor.
Aparte del color, que indica la fertilidad del suelo, lo ideal es saber su estructura (suelo es arenoso, arcilloso, humífero o franco) para poder comprender si se tiene es un suelo apto para las labores de agricultura o si se tiene un suelo pobre.
Cómo preparar la tierra de un huerto
Cuando ya se tiene el terreno seleccionado con las medidas y la ubicación idónea se debe eliminar cualquier objeto o material indeseado que se encuentre en el área. Es primordial revolver la tierra y considerar dos aspectos: nivelación y preparación del terreno.
Nivelación
Después de eliminar la basura y los escombros, es necesario nivelar con un pico y tratar de tapar los agujeros existentes. De modo que cuando se empiece la preparación del terreno, este sea más sencillo para poder llevar a cabo.
Preparación
Dependiendo las necesidades y el requerimiento de las plantas, se realizarán varios métodos en el terreno. Dentro de ellos están:
Cantero
Es un área delimitada que sirve para impedir la salida de material orgánico o de humus, evitando que se desplace y mejore su conservación. Incluso permite tener un mayor aprovechamiento del espacio. Para hacer un cantero, lo ideal es usar materiales como madera, bambú o bloques para que se forme un rectángulo.
Camas altas
Es una técnica que se parece a la de los canteros, pero se diferencia en que el resto de materia orgánica está a gran profundidad. Consiste en la unión de 3 capas de tierra. Es excelente para la siembra de hortalizas e incluso se puede usar la misma cama en varias ocasiones en cultivos cortos.
Caballetes
Es una técnica que se emplea en varios cultivos como la cebolla, la papa y el ajo. Consiste en el alzamiento de la tierra para cubrir a la planta que en su mayoría son bulbos y tubérculos, por lo que habría que enterrarse muy bien.
Surcos
Una técnica que se usa principalmente en gramíneas y algunas leguminosas. Consiste en abrir zanjas de 2 cm aproximadamente y esparcir las semillas para luego taparlas. Después cubrir con tierra previamente abonada.
Casillas
Este método es muy común para las cucurbitáceas. Consiste en varias áreas de unos 20 cm sin que tenga elevación donde se siembren las semillas.
Cómo preparar la tierra de un huerto con tierra de mala calidad
Hay varias técnicas para mejorar las propiedades de la tierra, métodos sustentables y económicos. Los más comunes son la lombricultura y el compostaje.
Compostaje
Es el resultado de la unión de materia orgánica (hojas secas y alimentos naturales en descomposición) y tierra. Se puede realizar en un recipiente con aberturas, o bien, en un hoyo. Es recomendable el riego y mezclar semanalmente en un período de dos meses para tener la composta lista para usarla en el huerto.
Lombricultura
Método que se parece al anterior, pero en el que intervienen las lombrices (las más usadas son las lombrices rojas californianas). Pueden estar en un recipiente o maceta con capacidad para filtrar. Estos animales también se alimentan de materia orgánica y precisan estar húmedos y en un lugar oscuro la mayor parte del tiempo.
Los desechos de carnes rojas, blancas, pescado o comida suele generar mal olor y atraer ratones u otros animales. Las revistas y los periódicos son excelentes para el proceso del lombricompostaje, aunque la tinta puede ser un factor perjudicial para los microorganismos.
Cómo preparar la tierra de un huerto para reducir la maleza
De los mayores problemas para quienes tienen un huerto, es la maleza. Un huerto es el responsable de la muerte de plántulas, ya que compiten por el aprovechamiento de espacio, luz y nutrientes. Sin embargo, existe una técnica que va a ayudar a tener menor maleza o falsa siembra.
La falsa siembra consiste en preparar el suelo de manera directa o el espacio que se va a emplear 10 días antes de la siembra. Así que habría que revolver la tierra y regarla para estimular la germinación de las malas hierbas. Cuando comiencen a emerger, eliminarlas y, con ello, evitar la propagación de la maleza. Esta técnica se puede repetir varias veces antes de la siembra.
No todas las semillas van al suelo
La mayoría piensa que todas las semillas van directamente al suelo, pero no es así. Algunas plántulas son muy delicadas, por lo que estarán propensas al ataque de malezas e insectos. Por eso, es necesario que pasen el proceso inicial de la germinación y su etapa de plántulas en un almácigo.
Ahora sabiendo todo esto, ya podemos iniciar nuestro huerto con éxito. ¿Qué dices?¿Te animas?