Ahora que la mayoría de personas están en pro de lo natural no hay nada mejor que empezar a crear un huerto en casa. La zanahoria es una hortaliza que no da problemas para su cultivo urbano, por lo que resulta una excelente opción para sembrar en maceta. Tan solo es necesario saber su proceso y cuidados para poder lograr un producto de gran calidad.
Cómo iniciar el proceso de siembra de la zanahoria en maceta
Es necesario tener en cuenta que una zanahoria de tamaño razonable para su consumo debe ser de alrededor de 20 cm aproximadamente, por lo que la profundidad de la maceta debe ser de 45 cm, considerando lo largo con lo siguiente. Deben tener de 8 a 10 cm entre cada zanahoria por el número que se quiere cultivar de hortaliza.
Los meses idóneos para sembrar son de marzo a Julio. Sin embargo, es mejor sembrar en tandas para obtener una producción escalonada.
Las zanahorias se pueden cultivar en distintos tipos de suelo a excepción de los arcillosos, el ideal es el sustrato rico, ligero y fresco.
Es importante tener en cuenta que la tierra no debe estar seca, pero tampoco el exceso de humedad es bueno, opta por el riego con regadera.
Coloca la maceta en un lugar donde reciba al menos unas 6 horas de luz solar.
De los puntos más básicos es el aclareo, ya que de ello dependerá el tamaño de la zanahoria. Para el aclareo (extracción de las plantas que sobran de la zona de cultivo) es necesario llevarlo en 3 fases.
- La preliminar a 2-5 cm, esto se hace una vez que salen las primeras platitas
- Entre 8-10 cm para aquellos cultivos sembrados en el mes de mayo.
- Para el mes de julio se deben dejar las plantas entre 5 –8 cm
La zanahoria es de ciclo largo, desde la siembra hasta la cosecha pueden pasar 90 días, aunque existen variedades de ciclos más cortos, de hasta unos 75 días. Las variedades se pueden clasificar según el tamaño, la forma de la raíz y el ciclo de cultivo.
Así que si se realiza una siembra escalonada se podrá garantizar una cosecha durante todo el año y, con ello, obtener un alimento rico en nutrientes que aportan innumerables beneficios para el organismo. El gusto de una zanahoria cultivada en casa no se compara con el de adquirir una. ¡Compruébalo!
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