Recordamos que la atención de un jardín no conoce de etapas o fechas particulares para cesar o menguar la actividad, y de forma prácticamente permanente los cuidados deben sostenerse para que el jardín se mantenga siempre hermoso.
Sin embargo algunas estaciones suelen representar la aparición de molestas plagas que deciden atacar nuestras especies de forma completamente indiscriminada.
Una de estas son los caracoles, una plaga particular de la temporada primaveral muy compleja de combatir ya que a pesar de su andar cansino suelen generar severos daños en los sistemas foliares, los cuales causan efectos secundarios difíciles de contrarestar como la aparición de enfermedades oportunistas de las lesiones superficiales generadas por la alimentación de este gasterópodo invertebrado.
En la actualidad y debido al gran daño que ocasionan, se comercializan una gran cantidad de productos para contrarrestarlos pero tambien tenemos algunas soluciones caseras que pueden ser de gran ayuda.
Disponer en torno a nuestras macetas de aros semi enterrados conformados por antiguas cámaras de bicicleta o automóvil ayudara a conformar una pequeña fosa en la cual podremos disponer una mezcla de vinagre, sal y agua la cual es altamente nociva para este especie y otras tantas plagas similares.
Efectuar surcos de café también es una estupenda alternativa, deben ser surcos gruesos y puede utilizar los sobrantes del filtro de su cafetera. La cal evita que los caracoles y hormigas trepen por el tallo de nuestras especies y siempre es una estupenda solución, económica y sencilla de implementar.
Los caracoles son animales hermafroditas. Las puestas se llevan a cabo principalmente en primavera y otoño, cuando las condiciones ambientales son más favorables. Dos semanas después de la puesta emergen pequeños caracoles que necesitarán algo más de un año para alcanzar la madurez sexual.
Los caracoles presentan un máximo de actividad en otoño y primavera, y un mínimo muy marcado durante el verano, cuando las calores ambientales estan muy acentuadas.
Los caracoles son de hábitos nocturnos. Durante las horas del día buscan refugio en lugares que no reciban la luz directa del sol. Es frecuente encontrar grandes agrupaciones de estos moluscos en los troncos de las plantas.
Hay algunas plantas de nuestros jardines como las Hostas en los que los caracoles producen unos daños tremendos.