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El conseguir espacios que hablen por si solos, el delimitar ciertas zonas o aportar volumen, estos son solo algunas razones por las que las piedras pueden ser las mejores aliadas del jardín. Siendo una manera sencilla de dar color a las flores y a las plantas.
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En cualquiera de sus formas, la presencia de piedras en el jardín permite dar todavía más ese toque de estilo. Gracias a ella se puede renovar por completo, dando así un protagonismo único.
Tipos de piedras para el jardín
Lo más importante para empezar a decorar los espacios verdes, es conocer sus usos para acertar a la primera.
Cantos rodados
Los cantos rodados permiten decorar a la vez que crean espacios como caminos. Incluso tienen la función de economizar áreas naturales gracias a su aplicación tapizante del suelo conforme a lo que se ha plantado, evitando el nacimiento de malas hierbas.
Por si fuera poco, pueden combinarse con otras piedras, creando contrastes singulares por su aspecto redondeado.
Es más, ayudan a delimitar espacios verdes o jardineras y de paso evitan que se inunden.
El uso en color blanco es excelente para jardines zen o japoneses.
Marmolina
Las gravas de marmolina es más que un triturado de piedra. De un aspecto irregular con aristas, de tamaño pequeño que se puede usar en el jardín.
Aparte de su alto valor al ser drenantes, también aporta ese toque decorativo al lugar.
Al igual que los cantos rodados, la marmolina ayuda a delimitar espacios y crear caminos. Sin dejar de mencionar su variedad de colores, por lo que es posible jugar con ellas.
Jardín de rocalla
Es de los estilos más usados en paisajismo. Esto se debe a sus innumerables oportunidades estéticas.
Los jardines de rocalla van a permitir creas espacios con tintes de montaña. El aspecto de piedra natural, está aconsejado en terrenos irregulares y, sobre todo, para aquellos jardines que se quiere crear una isla natural o jugar con desniveles o formar volumen.
Este conjunto de piedras son idóneos para formar parte de cualquier planta, ya sea en vertical o rastrero. Tan solo habría que tener su ubicación con suelo bien drenado para que luzca espectacular.
Sin embargo, lo recomendable es combinar vegetación que crezca en altura con otras plantas y den color. Siendo perfectos para las suculentas, ya que son capaces de crecer sobre la roca. Además, si se tiene un estanque puede ser el marco perfecto.