Flores y plantas que ayudan a cuidar la piel

Un hogar con flores, o bien, un pequeño jardín repleto de plantas y árboles, es tan solo un espacio que brinda total admiración y respeto por todo aquello que nos da.

Pero además de ello, la naturaleza siempre nos provee lo mejor y, como muestra, he aquí las flores y plantas que ayudan a cuidar la piel.

Así que cada vez más laboratorios cosméticos apuestan por comprobar la eficacia de lo natural en la piel. Recurriendo a lo más antiguo y milenario como los son las plantas que ya desde hace tiempos se emplean por sus enormes propiedades.

Plantas que conservan la belleza de la piel

He aquí un breve listado de las plantas que ayudan a mantener una piel sana. Sigue leyendo:

Manzanilla. Planta que es un antiinflamatorio natural. Para ello es necesario hacer un té que al enfriarse se coloca sobre la piel inflamada para bajar la hinchazón, o bien, para reducir las ojeras, la piel rojiza, la dermatitis o la urticaria. También al beber la infusión ayuda como relajante.

Diente de león. La hoja de diente de león al combinarse con el trébol rojo y la bardana en una infusión va a ayudar a limpiar el rostro eliminado el acné, así como los eccemas, la psoriasis y otros problemas de la piel.

Equinácea. También conocido como el antibiótico natural por excelencia, se emplea para prevenir infecciones. Para ello es necesario diluir la tintura y usar de forma tópica sobre las heridas y las picaduras de insectos. Incluso si se consume previamente diluido en agua ayuda a aumentar las defensas.

Caléndula. Estimula la cicatrización de la piel, ya sea en infusión o previamente diluida en tintura, resulta eficaz para aliviar las rozaduras, las llagas, las úlceras y las heridas. En la presentación de crema o aceite contribuye de manera óptima en las erupciones e irritaciones de la piel.

Rosa de mosqueta. Este arbusto es un potente regenerador natural que reduce las cicatrices y las estrías. La forma ideal para emplearla es de manera tópica en la presentación de aceite 100% puro sobre el área afectada.

Lavanda. Es una flor aromática que cuenta con propiedades antiinflamatorias y antiséptica. Se usa como aceite esencial o té frío para calmar erupciones, eccemas y quemaduras solares, entre otros. También se puede aplicar en aceite puro sobre alguna picadura de insecto.

Aloe vera. Se usa en tónicos para eliminar puntos negros y minimizar poros. Gracias a su acción cicatrizante, es un buen aliado para tratar los problemas con el acné. Incluso contribuye en la formación de colágeno y elastina, lo que lo hace ideal para retrasar los signos del envejecimiento. Debido a su acción reparadora se usa para calmar las irritaciones provocadas por el sol o la depilación.

Jojoba. En su presentación de aceite ayuda a engrasar la piel. El principal beneficio es que es un regulador de la producción de sebo, por lo que resulta eficaz en pieles mixtas y grasas para combatir el brillo y prevenir el acné, pero sin tapar los poros.

Árbol del té. Especie cuyas propiedades antimicrobianas ayudan a combatir las bacterias responsables del acné. Es un ingrediente que se usa como limpiador para pieles con acné, ya que mejora el aspecto y ayuda a prevenir nuevos brotes.

Karité. La manteca de karité es profundamente hidratante, nutritiva y humectante, lo que hace que mejore el aspecto de pieles secas y deshidratadas. Además, combate el envejecimiento prematuro de la piel al evitar que esta se seque.

Azafrán. Es una planta que se usa para diferentes tratamientos con el fin de mejorar el aspecto de la piel, limpiándola y eliminando todo tipo de toxinas. Otros de sus beneficios es el de calmar el picor, proteger de los rayos del sol y mantener la hidratación en la dermis.

Salvia. La salvia es una de las plantas apreciadas por sus múltiples propiedades terapéuticas, entre las que se encuentra su capacidad regeneradora de la piel a nivel celular. De igual forma, sus efectos astringentes, cicatrizantes y desinfectantes, está indicada en caso de presentar picaduras, urticarias, heridas e inflamación de la piel.

Hibisco. Esta planta brinda elasticidad y firmeza a la piel. Además, de ello combate los radicales libres que son los responsables de la oxidación celular que tanto perjudica a la piel.

Tomillo. El tomillo es una especia primordial en la cocina, pero se ha revelado que es uno de los mejores productos estéticos para la piel.

Menta. Esta planta cuenta con propiedades antiinflamatorias, expectorantes, antisépticas, analgésicas y antibacterianas. Gracias a su composición resulta un remedio natural que reduce la inflamación abdominal. Los beneficios se extienden a la descongestión de las vías respiratorias, alivia la irritación de la piel, reduce el acné, la dermatitis y la urticaria.

Consejos para tratar afecciones cutáneas con plantas y flores

Para poder tratar ciertas afecciones de la piel, es importante seguir estos consejos para ir a la segura:

• La piel presenta diferencias considerables de una zona a otra. Cada afección debe tratarse con productos específicos. Así que las plantas como la manzanilla, la caléndula o el tomillo o son excelentes para la mucosa bucal. Para las quemaduras leves o la inflamación las mejores son la lavanda y el aloe vera.
• Aunque se recurre a remedios caseros vegetales, es preciso poner especial atención a la piel más sensible.
• La mujer embarazada debe consultar con el médico antes de aplicarse o ingerir aceites vegetales o extractos.
• La piel es un tejido irrigado a través del cual los principios activos acceden de forma directa al torrente sanguíneo.
• Consulta con un especialista antes de utilizar cualquier tipo de planta.

Ciertas plantas actúan en muchos casos como un valioso recurso medicinal y estético que vale la pena aprovechar.

La naturaleza es tan sabia que no queda duda de que las plantas y flores sirven para cuidarnos por dentro y por fuera. Como recomendación es importante adquirir productos de buena calidad para poder disfrutar de todas las propiedades que ofrecen estas majestuosas especies. De igual forma, habría que conocer las flores comestibles para cultivar en el jardín para considerarlas.