Frutas y vegetales de colores inusuales o poco comunes

Probablemente, has escuchado la frase “Come el arcoíris”. Se refiere a la idea de llenar el plato con frutas y vegetales de muchos colores diferentes para aprovechar los beneficios nutricionales de una dieta equilibrada.

Lo que quizás no sepas es que todos esos colores pueden provenir de frutas y verduras diferentes a las que esperas. La primera reacción al ver una coliflor naranja o zanahorias moradas podría ser: “¡Ya deberían dejar de jugar con la naturaleza!”.

Pero la verdad es que la mayoría de estos alimentos de colores únicos son, en realidad, variedades ancestrales que han existido durante siglos o más. Muchas de las frutas y vegetales que comemos tienen una variedad de colores en la naturaleza, pero con el tiempo las hemos criado selectivamente para que tengan ciertas características. Entonces, aunque las zanahorias moradas eran comunes en Asia hace mil años, el naranja es el único color en el que tendemos a pensar hoy. Buscar estas variedades más antiguas puede darle a la frase “comer el arcoíris” un significado completamente nuevo. Pero para entender mejor todo esto, quizás convendría conocer las frutas y vegetales de colores inusuales o poco comunes para que puedas probarlos en tu propio huerto.

Hortalizas de colores poco comunes

Los colores inusuales son una tendencia clara en la sección de frutas y verduras.  Las variaciones de color a veces vienen acompañadas de un cambio sutil en el sabor, pero la diferencia es principalmente estética.

Zanahorias moradas. Las primeras zanahorias eran más moradas que naranjas. También eran comúnmente rojas y amarillas. A lo largo de los siglos, a medida que las zanahorias se cultivaban selectivamente para que fueran más dulces y tiernas, las variedades naranjas pasaron a primer plano. Sin embargo, las zanahorias moradas, rojas, amarillas y blancas todavía están disponibles y, aunque no son tan buenas si se comen frescas, son deliciosas cuando se cocinan.

Coliflor naranja. Aunque a esta variedad a veces se la llama coliflor “cheddar”, no tiene ningún sabor parecido al queso. La coloración anaranjada proviene del betacaroteno, que se convierte en vitamina A en el cuerpo. A diferencia de otras verduras que pierden color al cocinarse, el color naranja de esta coliflor se vuelve más vibrante.

Patatas dulces blancas. Puede que tengan el color de una patata tradicional, pero su forma claramente indica que son “batatas”. Las batatas blancas tienen una textura desmenuzable y hojaldrada, más parecida a las patatas normales cuando se hornean, pero son mucho más dulces. Esta patata tiene una larga temporada de crecimiento, por lo que puede no ser adecuada para las zonas más al norte.

Remolachas doradas. Si no eres fan de las remolachas rojas que tiñen todo lo que tocan, las remolachas doradas pueden ser justo lo que estás buscando. Mantienen bien su color después de cocinarse y pueden ser incluso más dulces y suaves que sus primas.

Tomates negros. Los tomates negros contienen mayores cantidades de antocianina, lo que les otorga una vida útil más larga de forma natural una vez cosechados. La pulpa interior es de un rojo intenso, lo que los convierte en un producto fantástico para una ensalada. Asegurarse de darles mucho sol mientras maduran para resaltar el color oscuro de la piel.

Berenjenas naranjas. Uno está más acostumbrado a las berenjenas moradas y quizás conozcan las variedades blancas. La berenjena naranja es una variedad africana (las otras son de Asia) que produce frutos del tamaño de una pelota de béisbol, que son muy dulces. Es lo suficientemente pequeña como para crecer en macetas, por lo que casi cualquiera puede probarla.

Pimientos de chocolate. En realidad no saben a chocolate, pero estos bonitos pimientos marrones son realmente únicos. Al igual que otros pimientos morrones, no son demasiado picantes, sino que tienen un sabor dulce, especialmente cuando están completamente maduros.

Patatas azules. Existen cerca de 4000 variedades de papas, todas ellas con un origen único en el sur de Perú. Con el tiempo, se han cultivado y desarrollado para lograr una variedad de características. Las papas azules y moradas no son comunes en los EE. UU., pero es divertido cultivarlas y son deliciosas para comer.

Espárragos morados. No es solo el bonito tono morado lo que hace que estos espárragos sean especiales. Las variedades de espárragos morados son más grandes y menos fibrosos, por lo que pueden comerse desde la base hasta la punta y son tiernos por completo. Tratar a todos los tipos de espárragos como plantas perennes en el jardín. Tardan dos años en madurar, pero después seguirán produciéndose durante muchos años más.

Rábano sandía. No, no sabe a sandía, pero sí parece a una cuando la cortas por la mitad. Además de su aspecto único, este rábano es más dulce y suave que otros rábanos. Cuanto más tiempo lo dejes en la tierra, más dulce se vuelve.

Frutas de tonos inusuales

La naturaleza nos presenta un amplio abanico de colores con el que alegrar y enriquecer el recetario de cocina. Conozcamos un par de ejemplos de frutas de tonos inusuales.

Kiwi dorado. Si bien, su forma puede parecer a los kiwis verdes, el kiwi dorado tiene una piel suave y sin pelo. Además, la pulpa es de un color amarillo con un núcleo más pequeño y pocas semillas. Es más dulce que los kiwis verdes, pero tiene un bajo contenido de azúcar y un alto contenido de fibra. Los kiwis dorados simplemente habría que cortarlos y sacar la pulpa, o bien, cortar en trozos. La piel es delgada y se puede comer.

Fresas blancas. Las fresas blancas son generalmente más dulces que las fresas rojas convencionales y a menudo tienen un sabor tropical. Muchas fresas blancas tienen una pulpa más blanda y pueden magullarse con más facilidad. Las fresas blancas simplemente carecen o tienen niveles muy bajos de la proteína Fra a1 que les da su color a las fresas rojas.

Manzana negra. Las manzanas Black Diamond (Malus Domestica) son una variedad rara de Red Delicious china, también llamada Huaniu, que se cultiva en una región montañosa del Tíbet. Su piel es de color morado oscuro, como la de una ciruela, casi negra. La pulpa interior es blanca. Se dice que tienen un sabor intenso y dulce, pero es casi imposible probarlas.

Sandía amarilla. Las sandías tradicionales obtienen sus tonos rojos por el licopeno, poderoso antioxidante. Las variedades de sandía que no contienen licopeno suelen tener pulpa amarilla. Se producen de forma natural y son seguras para su consumo. Aparte de la diferencia de color evidente, la sandía amarilla es más dulce que su contraparte de pulpa roja, con sutiles notas de miel y albaricoque. Sin embargo, se puede utilizar indistintamente con las variedades de pulpa roja en las recetas. También tienen beneficios para la salud similares, incluida la de ser una fuente de vitaminas A y C.

Plátano rojo. Esta fruta está repleta de nutrientes saludables. En primer lugar, los plátanos rojos son una gran fuente de fibra, que ayuda a mantenerte saciado durante más tiempo y estimula el sistema digestivo. Los plátanos rojos son una auténtica “joya ” y tienen un sabor delicioso. Esta fruta exótica, que antes solo se veía con una elegante cáscara amarilla, también se puede encontrar con piel roja. Esta inusual variedad de fruta tropical no solo tiene un sabor delicioso y es ideal para hornear, sino que también es una de las mejores en cuanto a nutrición.

Las frutas y vegetales vienen en una variedad de colores diferentes. Todos ellos con beneficios nutricionales únicos que son importantes para la salud.

Aunque estamos familiarizados con cierto color en los alimentos, date la oportunidad de probar y/o cultivar otras variedades de frutas y vegetales de colores inusuales y elige la mejor según tus gustos. Otro aspecto, igual de extraño, es la modificación de la forma de las frutas y vegetales que implica factores y tiene sus riesgos.