Qué hongos comestibles se pueden cultivar en casa

Cultivar hongos comestibles al aire libre en un patio trasero o jardín es un proceso relativamente simple y proporciona una fuente de proteína nutritiva y de bajo impacto durante varios años. Así que a continuación te mostramos qué hongos comestibles se pueden cultivar en casa para que empieces cuanto antes.

Qué son los hongos comestibles

Un hongo es un organismo carnoso que genera esporas. Muchos tipos de champiñones son comestibles y se pueden encontrar en platos que van desde pizza y risotto hasta cremas y ensaladas. Dependiendo de las especies de hongos, aparecen diferentes partes del mismo. En algunos casos, solo se come la tapa del hongo. En otros, como el tempeh, micelio de hongos (una red de filamentos tipo hilo) actúa como agente vinculante.

Si bien, se pueden encontrar fácilmente hongos frescos en un mercado, también se puede cultivar y cosechar hongos en el patio trasero o dentro de casa. Sin embargo, el crecimiento de los hongos no es lo mismo que el crecimiento vegetal. Con especial atención al medio de crecimiento y la temperatura, los principiantes pueden pasar del desove de hongos a una deliciosa cosecha de hongos en unas pocas semanas.

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Los hongos podrían habitar espacios que para otros pueden pasar desapercibidos o no se aprovechan lo suficiente. Quizás en un rincón sombreado donde no crecen los vegetales, por diversión o simplemente se quiere aprovechar al máximo el espacio del jardín. Al trabajar con hongos, no solo se agregan alimentos ricos en nutrientes al jardín, sino que también se apoya el ciclo de nutrientes y mejora la salud del suelo, lo que le da a las plantas y vegetales un impulso adicional para crecer.

El cultivo de hongos al aire libre, independientemente de la técnica empleada, ofrece ventajas sobre los métodos de interior, entre ellas se encuentran:

• Menos costoso

• Menos consumo de energía
• Menos residuos plásticos
• Menos contaminación
• Cosechas perennes
• Enriquece el suelo
• Alimenta la vida silvestre

Hongos populares para crecer en casa

Si bien, todas estas especies se producen fácilmente en granjas comerciales de hongos, también son buenos candidatos para el cultivo de hongos en el hogar.

Hongos cremini. Los hongos cremini tienen sombreros naturalmente oscuros que varían desde bronceado claro hasta marrón intenso. A menudo se encuentran junto a los champiñones en el supermercado y son un poco más grandes. A veces se les llama hongos “baby bella” porque son la versión más joven y pequeña de los hongos portobello. Reemplazar a los champiñones en sopas y salteados para agregar un sabor más intenso. 

Hongo shiitake. Esta variedad de hongos es famosa por su inclusión en la cocina japonesa. Los hongos shiitake tienen una textura carnosa y liberan un sabor terroso de umami cuando se cocinan. Se pueden saltear, freír, asar, utilizar como ingredientes en la pizza y agregar a las sopas.

Hongos morillas. Los hongos morillas son parientes de la preciada trufa, son de color tostado a marrón oscuro, con forma de cono y esponjosos, con un sabor ahumado, terroso y a nueces. Cuanto más oscuras sean las setas, más pronunciado será su sabor. Estas setas deben limpiarse bien cuando están frescas debido a su cabeza con hoyuelos. Al igual que la trufa, son caras, pero también se venden enlatadas y secas.

Hongos ostras. Los hongos de ostras son de color blanco a marrón claro, en forma de ventilador, con un sabor suave y dulce. Los champiñones de ostras a menudo se usan en la cocina china para saltear y sopas.

Hongo porcini. Los hongos porcini, de color marrón claro, son un favorito en las recetas toscanas y se parecen a los hongos venenosos de los cuentos de hadas. Cada uno pesa entre 50 y 500 g, y sus sombreros miden entre 2,5 a 25 cm de diámetro. Tienen una textura suave y carnosa con un sabor picante. Son deliciosos cocinados de diversas maneras y pueden mantener su forma cuando se usan en sopas y guisos. También se venden secos.

Hongo de botón o blanco. Los champiñones son muy fáciles de conseguir y suelen ser de color blanco o marrón muy claro. El tamaño de los sombreros puede variar. Son regordetes y tienen forma de cúpula y, un sabor suave y agradable que se intensifica cuando se cocinan. Son hongos fáciles de encontrar y muy versátiles, excelentes para consumir crudos o cocidos. También suelen estar disponibles enlatados y, a veces, secos. 

Hongos enoki. Estos hongos, de tallos largos y diminutos sombreros blancos como la nieve, están unidos en la base y se parecen a los brotes de soja. Su sabor es ligero y suave, casi afrutado, con una textura crujiente. También se venden enlatados. Si se usa en un plato cocinado, agregarlos en el último momento, ya que la cocción excesiva puede endurecerlo.

Hongos rebozuelos. Los rebozuelos, característicos de la cocina francesa, tienen forma de jarrón, son de color amarillo brillante o naranja y son caros cuando están frescos. Tienen un sabor y una textura delicados y a nueces, y también se venden secos y enlatados. No cocinar demasiado para evitar que se endurezcan y servir como guarnición o agregarlos a pastas y risottos. 

Hongo portobello. Un hongo denso y abundante popular en la cocina italiana. Es de los más grandes que se encuentran disponibles comercialmente, son la versión madura de los cremini. Su popularidad se debe a una brillante campaña de marketing en la década de 1980 para vender lo que entonces se percibía como hongos comunes “demasiado maduros”. El largo ciclo de crecimiento les da un sabor profundo, parecido a la carne, y una textura sustancial. Son ricos cocinados enteros o en rodajas, a la parrilla, al horno, salteados o fritos. Asegurarse de cortar la parte seca y fibrosa del tallo.

Paso a paso para cultivar hongos fácilmente

El secreto de cómo cultivar hongos de ostras, hongos shiitake o casi cualquier especie de hongos es proporcionar las condiciones de crecimiento correctas. He aquí el paso a paso:

• Proporcionar el medio de cultivo correcto. A diferencia de las plantas, los hongos no crecen mejor en tierra para macetas. Es más probable que prosperen en chips de madera, aserrín de madera dura (bueno para hongos shiitake), estiércol compostado (bueno para hongos blancos), paja (buena para hongos de ostras) o café (también bueno para hongos de ostras). Colocar su medio de crecimiento (también llamado sustrato) en un recipiente de al menos 15 cm de profundidad. Esto permite que el micelio de hongos se extienda libremente.
• Inocular los hongos. Hay dos formas de plantar o inocular hongos. Se pueden plantar esporas de hongos (el equivalente de semillas de plantas) o engendro de hongos (el equivalente de plántulas de plantas). Los principiantes deben usar Spawn de hongos para su primera cosecha y pasar a las esporas la próxima vez. No se necesita presionar a estos organismos en el sustrato. Simplemente, rociar la parte superior y agregar un poco más sustrato encima de ellos.
• Mantener el desove de hongos calientes para comenzar el proceso de crecimiento. Si bien, los hongos de cosecha propia lo hacen mejor a una temperatura entre 10 y 15 ˚C, se puede acelerar el proceso manteniéndolos alrededor de 21˚C durante sus primeros días de crecimiento. Colocar una almohadilla de calefacción debajo del recipiente en crecimiento para agregar ese calor extra.
• Mantener la cosecha húmeda. Los hongos prosperan en la humedad, pero no prosperan cuando se mojan. Intentar periódicamente la cosecha con una botella de spray, pero evitar dejar que el medio de crecimiento se empape. Algunos productores de hongos cubren el recipiente de champiñones con un paño húmedo o una bolsa de plástico holgada para atrapar la humedad.
• Verificar el brote de hongos. El proceso de brote para hongos se llama fructificación. En la mayoría de los casos, esto ocurrirá de tres a cuatro semanas después de que se plantó el engendro de hongos. El cultivo comenzará como pequeños hongos y luego crecerá rápidamente. Se puede decir que los champiñones están maduros cuando sus gorras se abren completamente y comienzan a separarse del tallo. También se puede agregar desove de hongo fresco al medio de crecimiento para continuar el ciclo.
• Comer hongos recién cosechados en un par de días. Los hongos frescos solo durarán un par de días. Comerlos poco después de la cosecha, o bien, congelar para un almacenamiento más largo. Los hongos que ya se han descompuesto, se pueden convertir en compost de hongos para alimentar a la próxima generación de esporas de hongos o desove de hongos.

Los hongos comestibles son organismos fascinantes que suelen compartir los mismos espacios naturales que las flores y las plantas. Pero además de ello, aportan grandes beneficios a la salud.

Los hongos comestibles son un gran complemento para las comidas, así que si deseas adentrarte en su cultivo, no lo pienses más y empieza cuanto antes. Asimismo, también puedes optar por flores comestibles y tener un jardín supercompleto.