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Si bien un jardín repleto de plantas y bellas flores puede lucir realmente espectacular, resulta desagradable encontrarse con unos ratones merodeando el patio. Así que para poder deshacerse de ratones existen ciertos métodos que convendría conocer.
Lo básico para tener un jardín libre de ratones
Lo primordial es tener un jardín limpio, libre de maleza y escombros. También se debe evitar la acumulación de objetos en desuso y desperdicios alrededor del hogar. Al igual no dejar sobras de comida en el exterior, ya que resulta muy atractivo para el ratón o la rata.
Cómo ahuyentar los ratones
Una forma simple para ahuyentar a los ratones es por medio de las plantas. Una que resulta eficaz es la menta, por lo que convendría formar una barrera por todo su alrededor. Además, se puede emplear el aceite de menta y rociar por aquellas zonas donde puede haber alguna presencia de ese roedor.
La ruda puede ser un paliativo a la hora de combatir ese animal, ya que el olor tan penetrante que tiene resulta repugnante para las ratas.
Otra planta que puede ser de gran ayuda es el estramonio (Datura stramonium) es una mala hierba que cuenta con atropina en las raíces y resulta tóxica para los roedores.
Una planta que funciona de maravilla es el tártago (Euphorbia lathyris). Así que va de maravilla para sembrar en el jardín, o bien, realizar un extracto que se puede esparcir a los alrededores. Para ello se debe macerar durante varios días un kilo de brotes en 10 litros de agua.
Una buena alternativa es emplear arena de gato usada, este olor les resulta desagradable y ahuyenta por completo a los roedores, aunque resulta desagradable para todos los que rodean ese hermoso jardín.
Para esas molestas ratas, las vibraciones de la tierra pueden ser una excelente idea. Por ello se puede emplear molinillos de madera y clavarlos en el suelo, el movimiento de los mismos con el viento va a ocasionar esos pequeños temblores en la tierra, lo que los va alejar del jardín.
Ahora que si se necesita algo más tajante para deshacerse de esos ratones de una vez por todas se puede utilizar veneno que se van a introducir en bolitas de queso con una mezcla de yeso blanco y agua y, luego esparcir en los alrededores. Otra técnica es empapar los corchos con grasa, ya que al ingerir este tapón los mata. Solo hay que tener especial cuidado con estos últimos métodos si te tiene una mascota, ya que también podría consumirlo.
